Disfruta de tu viaje con tranquilidad y evita cualquier imprevisto con estos consejos de seguridad.
Llegan tus ansiadas vacaciones, es el momento de desconectar, de dejar las preocupaciones a un lado y relajarte. Pero antes de poner rumbo a tu destino, sea donde sea, no está de más que tomes ciertas precauciones para disfrutar del viaje con total tranquilidad y evitar cualquier imprevisto que pueda terminar amargándotelo.
En casa
Una vivienda vacía y sola en esta época puede ser el caramelo más dulce para cualquier ladrón. Así que antes de marcharte de vacaciones, asegúrate de dejar todas las puertas y ventanas cerradas, incluso las que den a un patio interior. En el caso de las persianas, no las bajes completamente, así creerán que hay gente en la casa.
Procura no proclamar a los cuatro vientos que te vas de vacaciones, ni des pistas de tus pasos en las redes sociales, ya que tu “marcha” puede llegar a los oídos más inapropiados. Sólo tus familiares y vecinos más cercanos deben saber que vas a estar fuera durante unos días.
Para dar la sensación de que la vivienda no está vacía, evita acumular correspondencia en el buzón y baja el volumen del timbre del teléfono, pues un teléfono que no deja de sonar es la mejor evidencia de que no hay nadie en la casa.
También es importante que cierres el suministro del gas y del agua para evitar posibles fugas y accidentes. Para ahorrar consumo, recuerda desconectar los aparatos eléctricos como el televisor, la lavadora o el lavavajillas. Pon el frigorífico a la temperatura mínima y, si vas a estar varios días fuera de casa, no dejes comida dentro que se pueda echar a perder.
Si te desplazas en coche
Antes de emprender el viaje, comprueba que todo en tu vehículo marcha correctamente. Revisa el nivel y la calidad del aceite (recuerda que debes hacerlo con el motor en frío), del líquido refrigerante y del líquido limpiaparabrisas. También debes prestar atención al estado de las escobillas del limpiaparabrisas, ya que si están deterioradas, lo único que lograrán es ensuciarte más el cristal.
Verifica que todas las luces funcionen y estén bien reguladas. Comprueba también el estado y la presión de todos los neumáticos (hasta el de repuesto). Recuerda que el dibujo de los neumáticos debe ser superior a 1,6 mm. La presión debes revisarla con los neumáticos en frío y siguiendo las instrucciones del fabricante.
La revisión de los frenos también es esencial. Si al frenar notas una fricción metálica, posiblemente se deba a falta de líquido de freno o a que las pastillas estén desgastadas. En tal caso, lleva el coche a un taller profesional.
Y por supuesto, una vez comenzado en viaje, no olvides respetar las normas de Seguridad Vial y los consejos de la DGT.
Si viajas al extranjero
Lo primero que debes hacer es informarte del país en el que vas a estar para conocer cuestiones tan básicas e importantes como los documentos y visados necesarios para viajar, la moneda que se utiliza allí, sus leyes locales, el funcionamiento de su sistema sanitario o las vacunas que son obligatorias. En la web del Ministerio de Asuntos Exteriores puedes encontrar una completa guía de recomendaciones de viaje específicas para cada país que te será de gran utilidad.
Antes de viajar, escanea todos los documentos de identificación que te vayas a llevar (DNI, carnet de conducir, pasaporte, visado, tarjeta sanitaria, billetes de avión…) y guarda una copia de cada uno de ellos en tu correo electrónico, por si se te pierde alguno de ellos durante el viaje y lo necesitases para algo.
Apunta también los teléfonos del consulado o de la embajada española de ese país, así como los de los hospitales, la policía y otros servicios que pudieras necesitar en caso de emergencia. Además, conviene que informes a tus familiares y amigos más cercanos de los lugares en los que te vas a alojar y los recorridos que tienes pensado realizar, por si necesitan localizarte.
Si tu destino es un país de la UE, del Espacio Económico Europeo (Islandia, Liechtenstein, Noruega) o Suiza, recuerda solicitar antes de viajar la Tarjeta Sanitaria Europea para poder recibir en ese país los servicios de asistencia médica necesarios.
En algunos países los gastos médicos pueden ser muy elevados, por ello conviene que estés respaldado por un seguro. Con el Plan de Asistencia Familiar de Helvetia Seguros tendrás una amplia cobertura en tus viajes, al contar con asistencia en caso de accidente, enfermedad o cualquier otro imprevisto.